Balance legislatura municipal
1 de juliol de 2021
Dos años después de la toma de posesión del nuevo gobierno municipal es hora de valorar su gestión, la cual reconocemos ha estado condicionada por el COVID-19.
Muchas de las actuaciones realizadas hasta ahora lo han sido por proyectos aprobados en la legislatura anterior, si bien en ocasiones da la sensación de que se apropian de ellos, sin reconocer que son proyectos heredados de anteriores equipos municipales.
EL nuevo equipo ha traído un cambio en el estilo de gestión, y en la forma de comunicar, por un lado más directo, con una amplia utilización de las redes y de las nuevas tecnologías y una modernización de los canales clásicos como la pagina web, pagina web, por cierto, no traducida al castellano, lo que es una desconsideración hacia los habitantes de Palau que tienen como lengua habitual el castellano.
Reconocemos mejoras en algunas infraestructuras, en el pavimento, en la iluminación, o en la reposición de elementos deteriorados, en la instalación de puntos de ocio o actividades.
No compartimos la utilización que han hecho de proclamas y manifiestos que nada tienen que ver con el municipio y sí con la ideología de los componentes del equipo de gobierno. Este equipo de gobierno del Ayuntamiento incumple uno de los requisitos básicos de la gestión pública que es la neutralidad de sus actos.
Hemos apreciado lo mal que encajan las críticas, con prácticas poco elegantes, como intentar censurar declaraciones y publicaciones de la oposición o sancionar reclamaciones vecinales.
Por último, criticamos un cierto desinterés hacia la oposición, a la cual no se le da la categoría que le corresponde ni se la hace partícipe con la suficiente anticipación de actos, decisiones o proyectos, en lo que podría interpretarse un ejercicio para ponerse las medallas en la gestión municipal.